martes, 23 de mayo de 2017

Gracias Patricia... Gracias Gabriel...


                                      



            Ayer fue un día especial e inolvidable,  de sentimientos encontrados y sobretodo de mucho aprendizaje. Estudiando Stand Up comedy, tratando de aprender la difícil labor de escribir e interpretar monólogos cómicos he caído en cuenta y cuánta razón tiene mi profesor Gabriel Córdoba que los comediantes están subvalorados, se tiene la imagen de un tío o una tía graciosos que se montan en un escenario a decir lo primero que se les ocurra para hacer reír a la gente. Nada más errado, no es solo la cantidad de trabajo creativo, escribir y reescribir, inventar y reinventarse, sobretodo reinventarse como es mi caso, empezando todo de nuevo a las 41 años, agarrándome del salvavidas de lo que considero “talento” sintiéndome un poco descolocado en la mayoría de las actividades sin contar el hecho de ser inmigrante. Es el trasfondo que hay detrás de cada cómico como mi profesor Gabriel Córdoba que ayer presento su segundo libro en La Casa del Libro y algunos de sus alumnos estuvimos allí apoyándolo,  otros de los alumnos hicieron un breve monologo, luego la entrevista y una ronda de preguntas. Siempre me gusta escuchar a Gabriel, aunque guarda distancia prudencial con los alumnos, es un profesor comprometido, el tipo de profesional que al mismo tiempo de desarrollar su carrera de artista  ha sabido esquematizarla y detallarla para poder retransmitir el conocimiento de manera efectiva y eso no es fácil. Comentaba sobre lo complicada que es la vida del comediante, las dudas, los cuestionamientos, la eficiente “gestión de las emociones” que desde mi punto de vista es una genialidad haber resumido una bomba atómica en esas cuatro palabras y que no se aplica solo a los comediantes, cualquiera en su vida diaria debería hacerlo, gestionar sus emociones. La entrevista no tuvo desperdicio, los presentes hicieron preguntas y la verdad todo el mundo se pudo ir de allí con un bálsamo emocional, parte de él don que debe tener un artista, un comico, tocar las fibras que te harán salir de la presentación con una sensación plena y positiva o en su defecto reflexionando sobre las crudas verdades que se dijeron a manera de chiste. Al salir de la presentación fuimos a la academia, era lunes y día de clases, pero ese día no habría clases, nos visitaría la consagrada comediante Patricia Sornosa, ella daría una charla y le haríamos preguntas, ¿quién diría que no habría clases? Fue una clase magistral. Llegamos y ella ya esperaba, debo confesar que no la conocía, tengo mucho que aprender de la comedia española y para no ir tan perdido vi un video de ella que me encantó, pero conocerla y escucharla hablar sencillamente me embelesó.  Allí estaba con su cabellera rasurada y una presencia que ocupaba la academia, es una ferviente defensora de los derechos de las mujeres, que desde mi punto de vista es algo que no debería tener nombre, debería ser tácito y sobreentendido y menos tener que luchar por ellos. Me recordó a Sinead o´connor que en los 90 apareció con la cabeza rasurada y su cara angelical, si hablas de ella hoy en día nadie se acuerda de una sola canción pero todo el mundo te dice: oh sí! La de la cabeza rapada, absurdo por así decirlo. Así Patricia empezó la charla para cautivarme completamente: “Yo enseñar nada, ¿vale? No tengo nada que enseñar y se me da fatal, aquí estamos todos iguales” empezó a conversar con nosotros  y confirmaba tantas cosas que nos había enseñado Gabriel  y que la diferencia con él  no es más que la vocación de la docencia que compromete al profesor a transmitir su conocimiento como parte de su aporte a mejorar la materia que imparte y a la sociedad en la que vivimos. Patricia nos habló de su inseguridad,  de sus miedos, abriéndose a nosotros sobre lo que sentimos todos los que queremos dedicarnos a esto,   de como quería escribir sobre algo que la afectaba en su emocionalidad pero que por mucho tiempo que le dedicara o le afectara no daba risa, porque ese tema contiene sufrimiento, ¿cómo voltear eso para sacártelo del pecho, denunciarlo a viva voz y que de risa? ¡Por dios! Yo sabía perfectamente a lo que se refería, ser escritor de temas que te afectan escribir un libro y luego pasarse un switch y tratar de escribir monólogos cómicos, pero Patricia no lo dejo allí y entonces agrego: escriban de ustedes, sobre quiénes son y escriban desde sus sentimientos, escriban desde la IRA, si, desde la IRA, es maravillosa para hacer comedia, que sorpresa me invadió el cuerpo, que sensación recorrió mi cuerpo  se puede escribir comedia desde la ira!!, termino la charla y tenía que salir corriendo a trabajar porque empezaba mi turno, me hubiera gustado tomarme una foto con ella y haberle dicho lo maravilloso que me pareció todo lo que dijo. Así termine mi turno y me fui a casa pensando en todo lo que había aprendido ese día de Patricia y Gabriel. Me acosté en mi cama y empecé a leer noticias de Venezuela y cuántos muertos hubo durante las manifestaciones y ver los videos de la represión, empecé a chatear con mi esposa que esta allá con mi hija para saber si estaban bien, la angustia, la rabia dieron paso al insomnio, seguí leyendo las redes encontrando la noticia del atentado en Manchester, una bomba había matado a 22 personas y herido a 19, la mayoría niños y adolescentes que salían de un concierto.  La ira se apodero de mí, Patricia dijo que escribiéramos, pero que voy a escribir, ah! ya lo tengo: Habían cinco Yihadista sentados en una mesa armando una bomba, uno de ellos era un recién reclutado y pregunta: Ali ¿para que es este botón? BOOOOM ¡! Y murieron todos…. ¿No da risa verdad? … ¡pero da una satisfacción!  Gracias Patricia… Gracias Gabriel. 

martes, 9 de mayo de 2017

LITERANIA 2017





                                                         LITERANIA 2017



    Recuerdo el primer día de festival,  llegábamos algunos con miedo como el primer día de escuela, recelosos con nuestra obra bajo el brazo, habíamos salido de nuestras madrigueras, de nuestros pequeños laboratorios de historias, letras y pasiones, de ahí no queríamos salir, pero una voz nos decía susurrando con voz grave y maléfica, de esos duendes que viven dentro de los que hacemos esto, ese primer día era como la primera noche con una bella dama, todo podía venirse abajo por la emoción, no sabía cómo se hacía nada pero la excitación me embargaba, todo fue fluyendo, un pulpero indignado trato de incendiar el evento o por lo menos así lo veía mi imaginario, pero gracias a dios todo salió bien. Al  día siguiente menos miedo y clima inclemente, los corazones se abrieron y empezó la aventura, los duendes dieron libertad a los autores, autores, mis autores, los nerd, los frikis de humanidades, en sus escondites, en sus viajes, en su convivencia con sus personajes, el festival estaba lleno, pocos autores pero muchos personajes, la carpa llena de personajes, el gato Madriles saltaba de mesa en mesa dando zarpazos de alegría a cuanta cosa encontraba para luego ronronear en las piernas de algún lector que se acercaba a Manolo Sanahuja, también nos encontrábamos con el espíritu del sr Rojas, con toda la serena solemnidad de un astrofísico, caminando con sus manos atrás observando como Pierre Monteagudo luchaba para que las garras del olvido no lo consumieran, se paraba como un padre orgulloso detrás de Pierre a escucharlo como con vehemencia argumentaba su historia, con la voluntad inquebrantable del que quiere decir la verdad y quiere que sea escuchada, luego al lado de mi pequeño tablón olvidado como el nombre de mis cuentos estaba Esteban Díaz con su esposa Jimena, casi no cabíamos, los personajes de Esteban ocupaban todo el espacio, son tantos, a veces escalofriantes, no sé cómo vive tanta gente en su imaginario cada uno con una historia diferente, a veces no sabía que ocupaba más espacio si sus personajes o el aura maravillosa de él y su esposa. Al caminar por el pasillo no podías distraerte porque pasaban los orcos de Jordi Villalobos que de vez en cuando se detenían a tener alguna escaramuza con los caballeros de Manuel Revilla, espadas chocaban en el medio del festival mientras los lectores pasaban esquivando las luchas, Javier y Vanesa de Universo Literario corrían persiguiendo autores, dos poetas que además de escribir, se esfuerzan por dar a conocer a los desconocidos, que merito, que bonito, ellos son mis autores, mis nerds mis frikis, nosotros los de las letras, que sufrimos, vemos y padecemos la vida con otros ojos, con otra piel, con otro corazón y otra imaginación, unos cuentan historias que querían ser olvidadas, otros recuerdan historias para las nuevas generaciones, otros se transportan a otros tiempos donde existían caballeros, esos que hacen tanta falta, transportado a un mundo de fantasía que pueda alejarnos de este mundo de mierda,  luego me encontré en el bar a los escritores de las tormentas, así ese día conocí al primer escritor, Ricardo García-Aranda con sus poemas, con su amor eterno y dolor infinito compuesto por un armazón de risas y rudeza que esconde lo que padece el poeta, allí nos encontramos él con su poema y yo con mis cuentos, de los que no hablamos para no llorar, porque llevamos el alma a cuestas, por nuestra magia, la de los frikis, los nerd de las letras, hasta pronto literania, gracias por tanto. 

lunes, 3 de abril de 2017

La Despedida (fragmento)

Campanas de iglesia resuenan con tedio y melancolía. En el salón, un ataúd al fondo, y la foto de una mujer joven colocada a su lado. Muy cerca, hay un hombre joven y una niña de seis años tomados de la mano, vestidos de negro.
El hombre tiene la mirada al frente, perdida; está absorto, sin hacer gesto alguno, mientras las lágrimas corren por su rostro; no gime, no solloza, son solo sus lágrimas brotando como un reflejo. La niña lo mira con la inocencia infantil de no entender qué sucede. “Mamá está con Dios y los ángeles mi amor” —dice una abuela que acude al rescate. “Y, ¿cuándo vuelve?” —Pregunta la niña; dejando en silencio triste a su abuela, sin poder emitir sonido alguno.
Pasan los días, y el hombre comienza a controlar su dolor delante de su hija, debe mantenerse fuerte para ella; pero a la vez lidiar con el luto, con la pérdida del amor de su vida. Camufla su tristeza leyéndole un cuento a su hija antes de dormir; ya le dio la cena, la bañó, le puso su pijama; la rutina que mantenía siempre su esposa.
—Buenas noches princesa —dice él—, Dios te bendiga.
—Bendición papi —contesta la niña, y agrega—, voy a quedarme despierta un poquito, porque mami viene hoy a visitarme.
—Ok mi cielo —dice él con la voz quebrada—, dale un beso de mi parte.
Él se va rápidamente para que la niña no lo vea sollozar, y se acuesta en su cama sin quitarse la ropa, hundiéndose en un llanto profundo y descontrolado en la almohada: “¿Qué voy a hacer sin ti?” —se repite una y otra vez. Entonces, saca una botella de whiskey que esconde bajo la cama, y que saca todas las noches desde que su mujer se fue.
Cuando el alcohol empieza a hacer efecto, él habla solo, se culpa por la muerte de su esposa: Ese viernes era noche de películas y pizza en casa, pero las amigas de su esposa la llamaron para un reencuentro (...) 

El Suicida (fragmento)

Un hombre está sentado en la mesa redonda de un pequeño apartamento de una sola habitación, las cortinas están cerradas y solo una luz tenue ilumina el ambiente lúgubre de esa noche. Una botella de bourbon barato, una foto de su pequeña hija de tan solo 2 años y un revolver calibre .357 y más fotos; todo reposaba en la mesa excepto la foto de la pequeña niña, que él sostiene absorto mientras llora desconsolado, repitiendo: “Perdóname… perdóname…”
Una carta sin terminar y una pluma sobre el papel  yacen a un costado de la mesa, el toma el revolver por momentos y hace breves ensayos apuntándolo hacia el cielo de su boca, lo saca de nuevo y se golpea la frente con él, mientras el llanto se hace más intenso.
Entonces, toma del pico de la botella un trago largo y continúa escribiendo la carta de despedida; alrededor más fotos: una de su pequeña en sus brazos, fotos de una familia feliz alrededor del mundo, en diferentes lugares; se veían felices, se veían amados. Él toma el revolver nuevamente y saca las municiones; toma uno de los proyectiles y lo observa identificando a su verdugo, lee en él: WINCHESTER, y logra visualizar por un momento la imagen dantesca que dejará el verdugo al paso devastador por su cabeza.
Mira a su alrededor, preocupado por el desorden que dejará y que otro tendrá que limpiar; toma otro trago del pico de la botella, este mucho más largo que el anterior. Sus lágrimas no dejan de brotar descontroladas; coloca el proyectil en el revólver, firma la carta, toma lo que queda en la botella en un solo golpe, coloca el revolver en su boca y cierra sus ojos abarrotados de lágrimas. Ahora pone el dedo en el gatillo, y el silencio es interrumpido abruptamente por el repicar de un teléfono móvil, sorprendido saca el revolver de su boca, busca el teléfono y observa en la pantalla: “ID NO DISPONIBLE”. Confundido no atiende, y el teléfono vuelve a repicar.
Por fin contesta con un “Hola” amargo y hundido, del otro lado se escucha una voz femenina: “Hola, ¿me escuchas? Papá soy yo, tu hija.” Atónito, aleja el teléfono de su oído, lo observa y dice: “Es imposible, mi hija tiene dos años.” (...)

sábado, 1 de abril de 2017

El Lobo

   Sentado frente al ordenador obligando a mi rebelde cerebro a crear algo, sometido por la lógica social esclavista, aunque trabaje para mí, mi consciente militarizado da órdenes ofensivas a mi creatividad y a mi subconsciente, adjetivos como vago, flojo, deberías escribir al menos una jornada de ocho horas, como cualquier trabajo, así mi subconsciente registra esta autoflagelación y la creatividad obstinada de tanta chillería se retira a sus aposentos a jugar un rato más. Así me quedo solo frente al ordenador, junto al orgulloso sargento de caballería, preguntándole: ¿y ahora que sargento? ¿Sentaditos ocho horas aquí? Creatividad no cree en el tiempo, no cree en la lógica ni en lo obvio, ella  se inspira en lo etéreo, en lo que no se deja ver, en la timidez inherente a lo maravilloso, eso que hay que desarmar y desmenuzar para encontrar  el núcleo. Tome un libro y empecé a ojearlo, el sargento no se molesta por esto, él sabe que todo aquel que se llame así mismo escritor debe leer, leer mucho, así que logre desviar su atención un rato. En esos días estaba de visita en casa Itzu, un Lobo Siberiano, su mejor amigo se había ido de viaje y me encomendó la tarea de cuidarlo, actividad que realizo conjuntamente a la de escritor y es más lucrativa, me llamaba la atención que Itzu nunca ladraba, solo levantaba sus orejas con atención o cuando paseábamos y captaba a un perro en la distancia se agazapaba en pose depredadora, absolutamente fascinante. El libro que ojeaba era "El Filósofo y el Lobo" de Mark Rowlands, allí el autor a través de su experiencia viviendo gran parte de su vida con un lobo establece la siguiente  comparación: por una parte la sabiduría lupina, que trasciende en el tiempo y nos lleva al nacimiento del Imperio Romano cuyos fundadores Rómulo y Remo  fueron abandonados, encontrados y criados por una loba, al igual que  la mitología griega el hijo del Dios Apolo fue abandonado y criado por una loba quien  luego se convertiría en el fundador de Miletos, así el autor la comparaba con  la inteligencia Símica, vinculada a los simios y por lógica a los seres humanos, únicas especies con la capacidad consciente de engañar. Así que levante la mirada hacia itzu quien al mismo tiempo levanto su cabeza erguido y soberbio sin intención de serlo, nos miramos fijamente y creatividad recibió el estímulo, empezó a cantar una canción cuya letra sonaba en mi cabeza así:







“Había una vez un perrito chiquito con cara de nieve y ojitos de cielo… de cielo infinito… su cuerpo negrito como el universo con dos estrellitas que eran sus ojitos azules como el cielo infinito… pero perrito nunca ladraba… y su amigo le hablaba, le hablaba chiquito, le hablaba bonito a ver si ladraba pero no ladraba, porque ese perrito no era un perrito, era un Lobito que aullaba a la luna cuando está crecía y así el Lobito cantaba a la luna y ella contenta feliz sonreía.




     Y fue así como creatividad se fue de nuevo a sus aposentos silbando su creación después de quince minutos de trabajo, yo escuchaba la canción en mi cabeza sin saber escribir música y el sargento ofuscado también tarareaba la canción entre gruñidos porque quedaban aun siete horas y cuarenticinco minutos de trabajo. 


Imagenes: Virginia Caraballo      @virginiac21

viernes, 18 de marzo de 2016

Tristeza ... amarga compañia.

                                    Tristeza ... amarga compañía.



  Otro día mas despertando con esa sensación de pesadez en el cuerpo, buscamos las razones que nos motiven a ponernos de pie y solo encontramos las innumerables responsabilidades y deberes que nos amargan aun mas la existencia, no hay una razón aparente para tal desanimo. La rutina nos monta en su carruaje y nos lleva en estado catatónico a nuestro trabajo, se nos olvido sonreír, nuestra cara aparece borrosa en el espejo, ya no nos reconocemos. Lloramos hasta con una publicidad emotiva en la televisión y nos preguntamos... que pasa? por que me siento así?... Bienvenido al club amigo(a), podemos hacer chaquetas y gorros del club de los tristes. 

    Empecemos por hacer una pregunta fundamental: que es la tristeza? responda a esta pregunta sin buscar en el diccionario en un minuto, no siga leyendo hasta que haya podido definirla sin ayuda, en un minuto, listo?... tuvo dificultades para definirla? sabe que se siente pero no sabe definirla con exactitud? pues bien así empezaremos a definir nuestro problema y aquí esta la definición exacta de Tristeza: "Sentimiento de dolor anímico producido por un suceso desfavorable que suele manifestarse con un estado de ánimo pesimista, la insatisfacción y la tendencia al llanto". Ahora desglosemos dicha definición y encontraremos algo que llama la atención: "suceso desfavorable"  y usted dirá mi querido lector(a), pero es que no hay ningún suceso desfavorable en este momento...justamente !! ahí esta la raíz del problema. El alma se engripa al igual que nuestro cuerpo, desde nuestro nacimiento, inclusive desde nuestra concepción empezamos a sentir y padecer, empiezan las gripes del alma, que al igual que una gripe normal, no hay medicamento, solo reposo y tiempo, existen remedios pero no curas, mucha gente se engripa y continúa su vida normal yendo al trabajo y cuando parece que se ha curado recae nuevamente y se habla de "gripe mal curada", es allí donde estamos en este momento en una serie de gripes del alma mal curadas, una serie de sucesos desfavorables que ya incluso nos cuesta recordar pero al igual que una gripe normal mal curada, sigue ahí y nos enferma en cualquier momento, así que es momento de tomar acciones y curarnos definitivamente de esa congestión del alma.


    Nos tomaremos un tiempo para nosotros sin preterición alguna, sin distracciones, apagaremos el móvil y lo quitaremos de nuestra vista para evitar tentaciones (se que es difícil pero adicionalmente es una buena terapia de desapego electrónico), tomaremos lápiz y papel o si detesta estas fórmulas terapéuticas de andar escribiendo y considera que puede hacerlo mentalmente pues también sirve, hágalo de la manera que se sienta mas cómodo y se va a transportar a los sucesos desfavorables desde  que tenga memoria de ellos  y tome en cuenta lo siguiente, todo suceso desfavorable que usted logre recordar es porque le produjo una profunda tristeza, escriba y describa cada uno de ellos revivalos y confronte sus sentimientos, llore, grite y desahoguese, golpee un saco de boxeo o una almohada, haga todo lo que ese sentimiento lo induzca a hacer (por favor evitar los homicidios que puedan relacionarme como cómplice), una vez hecho esto con todos y cada uno de los sucesos desfavorables, vamos a tomar el papel y lo quemaremos. Para los Jedi que lo hacen con la mente pues imaginen una hoguera e incinerando alli cada uno de esos "Sucesos Desfavorables". Una vez hecho esto como terapia de desintoxicacion, pasaremos a la etapa de sanacion y vamos a hacer el mismo inventario pero de todas aquellos motivos que tenemos para ser felices y que me atrevo a escribir los dos primeros: 1.- Estamos Vivos y 2.- Tenemos salud !!! y de esto estoy seguro porque obviamente si estuviera muerto pues no hay nada que hacer y si estuviera enfermo sabria con claridad porque estoy triste. Asi que a partir de estos dos puntos maravillosos vienen el resto de los motivos que son nuestra familia, nuestros amigos, nuestros logros, todos los momentos maravillosos que hemos pasado viajando o celebrando, aquellos paisajes, parajes o lugares fotografiados en nuestra mente como especiales e inolvidables y sobre todas las cosas que nos convierten en lo que  somos, particulares y diferentes, con talento, sentimientos y pensamientos propios y originales y veran que a partir de ese momento la figura borrosa del espejo, empieza a tomar de nuevo su forma original, espiritual y universalmente hermosa y unica. Y en cuanto a lo que dejaron de hacer por esa tristeza, es hora de poner manos a la obra en los sueños. Ya vieron la foto de Snoopy en la portada del Blog? ya se preguntaron: y este de que va poniendo a snoopy en el blog?... pues les explico la razon,  lo que significa esa foto para mi. Es un perro con traje de piloto que vuela en su caseta para perros como si fuera un avion. Eso mis queridos lectores, es hacer realidad los sueños. Muchas gracias por leerme.